La formación es el mejor camino para avanzar; es una inversión que proporciona capacidad crítica para pensar, analizar, poner en marcha y resolver. Y es que dejarte guiar por los que saben es una opción de éxito. Valladolid se sitúa a la vanguardia de la movilidad. Por esta razón, se posiciona como mentora de ayuntamientos y organizaciones para la gestión de programas financiados por fondos europeos, con el fin de aplicarla en sus territorios.
De hecho, PROSPECT+ es un proyecto de aprendizaje y capacitación de Horizonte 2020, en el que la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Valladolid participa como socia y formadora. Su papel se centra en aportar la experiencia de la ciudad en la ejecución y financiación de iniciativas de movilidad sostenible. Es más, en una primera edición, que se celebró en 2019, abrió camino a 19 ciudades europeas en sus planes de movilidad.
En este marco una delegación procedente de Moldavia, Grecia y España ha conocido de primera mano la experiencia de la ciudad en proyectos sostenibles, como la Misión 100 Ciudades Inteligentes y Climáticamente Neutras (Mission Cities), que busca acelerar la descarbonización para el horizonte 2030 junto a otras 100 ciudades europeas; PE4TRANS, de Interreg Europe, que impulsa la movilidad urbana sostenible a través de la participación ciudadana y la experiencia de ciudad inteligente mediante el proyecto tecnológico SmartVA!.
ALUMNOS, SATISFECHOS
Los participantes de este proyecto regresaron a sus ciudades con la maleta llena de inspiración. Es el caso de Spyridoula Zachari, representante de la localidad griega de Fyli, que se mostró impresionada por las intervenciones verdes, en especial las letras de Valladolid y la cubierta vegetal de la plaza España. En esta línea, subrayó que todo parecía funcionar sin esfuerzo, donde los ciudadanos disfrutan de la estructura de la ciudad, las calles, las plazas… «Es muy importante para nosotros poner el foco en la colaboración público-privada en estos proyectos y también en la participación de la ciudadanía; la combinación de ambos aspectos es un punto clave para el éxito».
Isac Victoria, representante de Moldavia, aseguró que en su caso el tema de la movilidad eléctrica es muy importante. Por este motivo, reconoció que, tras la visita a Valladolid, tenían mucho más claro qué pasos tienen que seguir para abordar el transporte público sostenible. «La esencia está en trabajar en equipo para desarrollar los proyectos y generar una comunidad adecuada. Me ha inspirado mucho para ver qué podemos hacer nosotros».
Los representantes de las ciudades participantes también conocieron sobre el terreno algunos de los casos de éxito desarrollados dentro de proyectos europeos con un recorrido por la rehabilitación energética de Remourban y las actuaciones de renaturalización llevadas a cabo dentro de Urban Green UP; visitaron el pantógrafo para la recarga de autobuses eléctricos situado en el barrio de Arturo Eyries o las instalaciones de la empresa municipal de transporte, Auvasa para conocer los proyectos que allí se desarrollan.
Juan Francisco de Lucas y Lola Cadarso, representantes de Soria, apuntaron que estas jornadas son «necesarias» para ver qué se está haciendo en otros lugares. En especial, pusieron el foco en el Ayuntamiento de Valladolid, del que resaltaron su trabajo en movilidad sostenible con la electrificación del transporte urbano, los carriles bici muy desarrollados por la ciudad y todas las actuaciones que están haciendo para la biodiversidad por las calles del centro. «Son proyectos que tienen que ser el futuro de las ciudades que queremos ser sostenibles», concluyeron.
UNA FORMACIÓN CERCANA
Ángela Rivada, técnico de la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico del Ayuntamiento de Valladolid, explica que el programa de capacitación se basa en cuatro fases y un modelo de trabajo híbrido, es decir, una mentoría virtual y formación presencial tanto en aula como en el terreno. «Nuestro asesoramiento se basa en mostrarles cómo construir el equipo necesario y multidisciplinar para conseguir la financiación necesaria para llevar su proyecto a cabo. En segundo lugar, les indicamos que crear una estrategia es clave, pero no puede frenarlos a la hora de avanzar. También les indicamos la mejor manera de construir el ecosistema de innovación de sus proyectos, y, por último, les asesoramos para elaborar un plan de acción», detalla.
Un proceso del que, según reconoce, están muy «satisfechos» porque se están creando redes de contactos y un efecto multiplicador. En este punto, Rivada comenta que, gracias a la primera edición del programa PROSPECT+ uno de los participantes se convirtió en su mejor embajador. Por ese boca-oreja hace unas semanas un grupo de trabajo del área metropolitana de Nápoles se trasladó a Valladolid para compartir su recorrido en proyectos de acción por el clima.
Artículo publicado en el suplemento Innovadores de EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN. Autora: E. L.