El sector de los videojuegos genera en España 9.000 empleos directos y 23.000 indirectos, con una facturación de 1.479 millones de euros en 2019 y un crecimiento de dos dígitos en los últimos años. Son datos de la Asociación Española de Videojuegos (AEVI) y que presentan al videojuego como motor de las industrias culturales y el desarrollo tecnológico en nuestro país. Su pujanza queda patente en la Feria de Valladolid, que ha puesto en marcha Ultralan Gaming Festival de la mano de Kaiju Entertainment, con el patrocinio del Ayuntamiento de Valladolid a través de la Concejalía de Innovación, Desarrollo Económico, Empleo y Comercio, y con la colaboración de Carrefour.
Madrid y Barcelona aglutinan gran parte de esta industria. Zaragoza, Valencia y Málaga están ganando terreno. Valladolid aspira a constituirse en ciudad de referencia en torno al sector del videojuego con este festival como revulsivo que sitúe a la capital del Pisuerga en el mapa de la industria nacional y ponga de manifiesto su gran potencial profesional y económico.
«Desde el Ayuntamiento hemos apostado por ello», asegura la concejala de Innovación, Desarrollo Económico, Empleo y Comercio, Charo Chávez, quien menciona un doble objetivo de esta apuesta: «Dinamizar el sector empresarial del videojuego, de gran valor añadido y clave para la transformación digital, y convertir a Valladolid en un referente de la industria del videojuego a través de un evento de gran interés que incluye distintos tipos de actividades».
Pentakill Studios es sin duda un referente en Valladolid de la industria del videojuego. Su impulsor y CEO, David Lorenzo, destaca el gran potencial que ofrece la capital: «Tiene todo lo bueno de una ciudad grande, con multitud de servicios, y también de la pequeña. Las comunicaciones son muy rápidas tanto dentro como con cualquier punto de España, los alquileres muy baratos comparados con Madrid o Barcelona y con una gran calidad de vida. Son unas fortalezas que debemos poner en valor para atraer a esta industria».
Pero de momento, Valladolid no es capaz de retener talento en este campo y la gran mayoría de los profesionales que se forman en este sector se van a otras ciudades y muchos al extranjero. «Es muy difícil competir con Francia, Alemania o Reino Unido, donde un profesional cobra tres y cuatro veces más que en España», asegura David Lorenzo, quien también pone de ejemplo a Portugal, por su apoyo al emprendimiento a través de exenciones fiscales. «Deberíamos aprender de ellos».
Pentakill Studios tiene asociado su propio centro de formación iVisual, escuela de nuevas tecnologías, por la que en los siete años de andadura han pasado más de 400 alumnos de forma presencial y muchos más 'online'.
Precisamente, en la formación es donde David Lorenzo ve más necesidad de actuación, sobre todo por parte de la administración. «El proceso para actualizar los temarios es tan lento y farragoso que la tecnología siempre lo supera. Nosotros lo modificamos en el mismo año para poder enseñar a nuestros alumnos los últimos avances pero en la enseñanza homologada (grados de FP) eso es hoy día impensable. El sistema se tiene que poner al día», reclama.
Entusiasta de su trabajo, David Lorenzo es ejemplo de que en Valladolid se puede poner en marcha un estudio 'indie' de videojuegos capaz de llevar a cabo proyectos de gran envergadura como 'The Occultist', su última aventura, finalista de los Playstation Talents 2021 –ha representado a España en la EuroPlay Video Game Contest– y que cuenta con el patrocinio de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Valladolid.
Y no duda en recomendar a cualquier joven a que se forme en este campo. «Es un trabajo apasionante, con mucho futuro. El crecimiento anual es enorme. Si una Administración no sabe verlo y no apuesta por ello, a la larga quedará cojo su desarrollo digital», vaticina el CEO de Pentakill Studios.
El Ayuntamiento de Valladolid se ha subido ya a este tren y quiere que el sector del videojuego sea uno de los pilares del nuevo modelo productivo y así lo recoge en su plan de Innovación, como recuerda Charo Chávez.
Dos millones de inversión para crear 'The Occultist'
Varios años de trabajo. Profesionales de altísima cualificación. Cientos de bocetos. Miles de líneas de programación… Horas y horas frente a la pantalla del ordenador. Cuidado hasta en el último detalle. Todo eso hay detrás de un videojuego. Y todo desarrollado por profesionales de altísima cualificación: auténticos especialistas en sus campos. Es una gran producción audiovisual, como puede ser un largometraje en el cine. Y todo eso requiere de inversión y de gente que apueste por ello.
'The Occultist' es el proyecto más ambicioso que se ha desarrollado en Valladolid y con un estudio castellano y leonés. Se trata de un videojuego de terror psicológico narrativo en primera persona. Presupuesto: dos millones de euros. Y está en marcha. Es obra de Pentakill Studios, liderado por David Lorenzo, y un equipo de once personas se dedica en cuerpo y alma a sacarlo adelante. Si todo va bien, como va, verá la luz a mediados de 2023 y desde su nacimiento ya parte con buenas sensaciones, finalista en distintos grandes certámenes europeos. «Dos millones de euros puede parecer mucho dinero, y lo es, pero dentro de este sector es una inversión que, si se hacen las cosas bien, puede ser muy rentable. Estamos en un mercado mundial y no es descabellado vender un millón de copias. El precio que se baraja para 'The Occultist' será de entre 20 y 30 euros, con lo que las cuentas salen», resume Lorenzo.