El Ayuntamiento de Valladolid ha resuelto el segundo procedimiento de la convocatoria de Subvenciones para Empresas de Nueva Creación de 2024 con 36 nuevos beneficiarios. Sumadas a las 57 de la primera resolución, son 93 ayudas para nuevas empresas a las que ha apoyado el Consistorio, de las 167 solicitudes recibidas. 

La convocatoria ha generado 156 puestos de trabajo; el 66% corresponde a autoempleo, y el 34% a empleo mediante contratación indefinida a tiempo completo o parcial. 

Casi la mitad, en concreto un 46%, ascienden a la máxima ayuda, entre 5.000 y 6.000 euros y la ayuda media concedida ha sido de 3400 euros por solicitud. Se trata de una convocatoria compatible con otras subvenciones para autónomos de la Junta de Castilla y León. 

Perfil de los beneficiarios

La mayoría de los beneficiarios son autónomos, un 76%. Casi la mitad de las ayudas va destinada a los sectores del comercio, con un 26%, y la hostelería, con un 22%, seguidos de los servicios personales, el 17%, y de otras actividades profesionales, el 11%. 

El 51% son mujeres y el 49% hombres y por edades; el 38% es mayor de 45 años, el 34% está en la franja de los 35 y los 44 años y el 28% es menor de 35 años.

La convocatoria de Subvenciones para Empresas de Nueva Creación 2024, que gestiona la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico de Valladolid, IdeVa, adscrita a Alcaldía, se dirige a profesionales autónomos y empresas de la ciudad. Su principal objetivo es ayudar a minimizar los gastos corrientes en la puesta en marcha de la empresa. En este caso se trata de nuevas empresas que se han constituido entre el 1 de junio de 2023 y el 31 de mayo de 2024.

El programa busca eliminar barreras para los emprendedores. Además, pone el foco en los colectivos que tengan más dificultades para acceder al mercado de trabajo y que, mediante la creación de su propio empleo, contribuyen al desarrollo de la economía local y mejora del empleo en el municipio de Valladolid. 

Estas ayudas reflejan la importancia que ha dado el Ayuntamiento de Valladolid al apoyo al emprendimiento como elemento dinamizador de la economía de la ciudad. Desde la primera convocatoria, en el año 2005, hasta la actualidad se han ido adaptando a las necesidades de los emprendedores y de las circunstancias económicas: desde una ayuda única durante 10 años a una ayuda porcentual respecto al gasto subvencionable. Uno de los cambios recientes más significativos ha sido la compatibilidad y complementariedad con otras ayudas públicas, al cubrir gastos que no contemplan otras subvenciones, como el gasto corriente.