Valladolid forma parte del selecto grupo de siete Ciudades Inteligentes y Climáticamente Neutras 2030, y hoy el alcalde, Óscar Puente, ha destacado su importancia en el Curso que ha organizado la Universidad Internacional Menéndez Pelayo. En Santander el alcalde de Valladolid ha compartido experiencias con los alcaldes y representantes de ese grupo integrado por Madrid, Valencia, Vitoria, Zaragoza, Sevilla y Barcelona. Y el denominador común ha sido la apuesta por la sostenibilidad en todos los ámbitos de actuación para conseguir la progresiva reducción de emisiones contaminantes y contribuir a la lucha contra el cambio climático.
La Universidad Internacional Menéndez Pelayo ha organizado el Curso sobre los cambios que hay afrontar para lograr una Europa con cero emisiones para el año 2030, un proceso en el que las ciudades juegan un papel esencial, porque son grandes consumidoras de recursos y energía y también grandes generadoras de residuos. El alcalde, Óscar Puente, ha reiterado el apoyo de Valladolid: “Nuestro compromiso con la sostenibilidad es claro. Supone una responsabilidad y un reto. Estamos decididos a no defraudar y conseguir que en ocho años Valladolid se una ciudad neutra y sostenible”.
En su intervención el alcalde se ha referido a la ola de calor y a la decisión de la Confederación Hidrográfica del Duero de prohibir con carácter general los riegos de las zonas verdes como pruebas evidentes de la necesidad de aprovechar el tiempo para intervenir sin dilación en la lucha contra el cambio: “Hay que convencer al ciudadano de que una medida, aunque parezca mínima, sumada a otras pequeñas de otras ciudades de muchos sitios del mundo, resulta eficaz”.
Hay cinco aspectos en los que se basa la política del Ayuntamiento de Valladolid: la planificación es la medida más inteligente que se puede tomar en una ciudad y por eso son necesarias medidas a medio y largo plazo. El PGOU contempla una ciudad compacta a diferencia del anterior modelo que habilitaba grandes urbanizaciones -las denominadas áreas homogéneas- alejadas del centro de la Plaza Mayor.
El segundo aspecto es la eficiencia energética. El Ayuntamiento apuesta por la instalación de las redes de biomasa como fuente de energía, la rehabilitación de edificios y la implantación de las energías renovables, con la instalación de placas solares.
El tercer aspecto es la economía circular para tratar de aprovechar todo el material. No es casualidad que el compromiso de las ciudades españolas por la economía circular promovido por la FEMP se denomine la Declaración de Valladolid.
El cuarto es la renaturalización urbana para captar CO2 y lograr una ciudad más verde con soluciones imaginativas, como los jardines verticales o los toldos verdes de la calle Santa María.
“Y la movilidad es absolutamente clave”, según ha enfatizado Óscar Puente en la enumeración del quinto ámbito de actuación.
En consecuencia, el Ayuntamiento de Valladolid apuesta por racionalizar el uso del vehículo privado, que es el que se utiliza en el 30 por ciento de los desplazamientos. La distribución equitativa del espacio urbano es el objetivo y por eso es necesario aplicar medidas audaces y eficaces. “Hace falta consensos políticos”, ha proclamado Óscar Puente, que echa en falta la colaboración de la oposición. Mientras, el Gobierno Municipal propugnará el uso del transporte público, la bicicleta, los desplazamientos a pie y el uso racional del coche particular.
En este contexto es en el que surge la necesidad imperiosa de conseguir que las ciudades logren alcanzar la transformación verde y digital que propugna la Unión Europea, y que ofrecen además un gran potencial para nuevas oportunidades empresariales y de empleo. En ese marco nace la “Misión Ciudades Inteligentes y Climáticamente Neutras 2030”. A cuya selección se presentaron 370 municipios europeos, 28 de ellos españoles, y entre los que fue elegido Valladolid, junto con las capitales que han participado en el encuentro de Santander.
El Ayuntamiento de Valladolid aprobó en noviembre de 2021 la Hoja de Ruta para la Implementación de la Misión Europea 100 ciudades inteligentes y climáticamente neutras poniendo de manifiesto la ambición, la apuesta y el compromiso de la ciudad para conseguir el objetivo de neutralidad climática de la ciudad en el año 2030. Un paso decisivo que se corroboró con la firma de un precontrato climático de la mano del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y la plataforma CitiES2030 que tuvo lugar el Valladolid el 13 de diciembre en presencia de la vicepresidenta Teresa Ribera.
El Ayuntamiento ya ha comenzado a trabajar en el plan de inversiones para la neutralidad climática de la ciudad de Valladolid. De hecho, desde que se marcó el objetivo de la neutralidad en el pleno de noviembre del 2021 la Agencia de Innovación está promoviendo reuniones con las principales entidades financieras y grupos de inversión privados para acelerar la captación de inversiones hacia proyectos sostenibles.
La primera contempla la Rehabilitación sostenible e intervenciones integrales para la eficiencia energética, mediante la cual se implantarán distritos climáticamente neutros. Se fomentará la neutralidad climática en el parque edificatorio privado. Se avanzará en la creación de al menos un distrito de energía positiva. Y, asimismo, se trabajará para conseguir la etiqueta "Carbono cero-neto" en todos los edificios municipales y en aquellos que se construyan bajo la supervisión municipal.
Una segunda línea de actuaciones está dedicada a Movilidad urbana y metropolitana sostenible y segura, desde la que se potenciará el transporte público, la descarbonización de las flotas municipales y la incentivación para la movilidad sostenible de las flotas empresariales.
Otro de las áreas tiene como eje la Economía Circular para el consumo y la producción sostenibles.
Una cuarta palanca está dedicada a la Renaturalización de Valladolid. En este sentido, la nuestra ha sido una de las primeras ciudades europeas en apostar por devolver la naturaleza al espacio urbano.
Y el quinto será la Gobernanza para la neutralidad climática, por el que se establecerán nuevas formas de gestión y dirección, se habilitarán procedimientos de innovación para el desarrollo de las políticas urbanas, incidiendo en la economía del conocimiento, y se aplicarán instrumentos regulatorios, fiscales y organizativos.
Me gustaría apuntar, también, las razones que responden a la ambición que ha movido a Valladolid a participar en la Misión. Esas razones son: Oportunidad, Desafío, Responsabilidad y Posicionamiento.